La infertilidad es una alteración del aparato
reproductor, femenino o masculino, en el que el hombre o la mujer no pueden
tener hijos. Por lo general, se
diagnostica después que la pareja ha intentado concebir de manera natural
durante un año, sin obtener resultados positivos, o cuando la mujer ha tenido
varios abortos o partos pretérmino; es decir, no se ha llevado el embarazo a
término con resultados satisfactorios.
Según las estadísticas, el 85%
de las parejas jóvenes y sanas conciben tras un año de relaciones, un
porcentaje que sube hasta los 93% tras 2 años. Se calcula que aproximadamente
una de cada ocho parejas se enfrenta a problemas a la hora de conseguir un
embarazo. La infertilidad afecta de igual manera a mujeres y a hombres: el
origen del problema se encuentra en un 30% en la mujer y en un 30% en el
hombre. En otro 30% de las parejas ambos aportan factores adversos y en el
restante 10% la infertilidad tiene un origen desconocido.
Buen trabajo Marta. Espero que tengas mucho éxito con tus entradas. Felicidades.
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